Ya no queda nada para el 21 de junio y el calor ya nos pide que pongamos el Modo Verano ON. Nos apetece vestir con ropa más ligera, hacer planes al aire libre y, en la cocina, entran productos de temporada y recetas más frescas. En verano, nos encanta pasar el día en la playa, organizar un picnic o salir de excursión y necesitamos pensar en platos rápidos y fáciles que podamos llevar para comer fuera de casa. Para que no te suponga un rompedero de cabeza, en Pipa&Mima te damos unas cuantas ideas:
Ensalada
Un clásico. Y no es de extrañar porque es la comida perfecta para verano: ligera, fresca, fácil de transportar y ofrece un sinfín de posibilidades. Puedes hacerte una ensalada mixta de toda la vida o innovar un poco y crear combinaciones con los ingredientes que más te gusten. Algunas ideas que se nos vienen a la cabeza y que están buenísimas son la ensalada de mango, mozzarella y frutos secos; la de brotes verdes con pollo, aguacate y queso feta; o la ensalada de boquerones y espárragos verdes. Puedes probar también a cambiar la base de la ensalada y hacerla de pasta, arroz, quinoa o garbanzos, por ejemplo. ¿Te animas?
Un truco para llevar la ensalada en porta alimentos o en bote de cristal es colocar los ingredientes en orden ascendente, de más húmedo a más seco. Así, los alimentos como el mango o los boquerones permanecen en el fondo y los frutos secos o las hojas de verdura, en la superficie. De esta manera se conservará mejor. También recomendamos llevar el aliño en un recipiente aparte y añadirlo en el momento de consumir la ensalada.
Tortilla
Otro de los comodines de los platos para comer fuera de casa. La de siempre, la de patatas, con o sin cebolla (podríamos abrir un debate sobre esto), es una opción totalmente válida, por supuesto. Pero, ¿y si vamos un poquito más allá? Te animamos a que pruebes con nuevos ingredientes. Tortilla de tomate, queso y jamón para los más pizzeros, por ejemplo; de calabacín o espárragos, una buena manera de introducir verduras en la dieta de nuestros pequeños; o ¿por qué no? de bacalao, sencilla y deliciosa a partes iguales y perfecta para aportar la energía que necesitamos para afrontar la tarde de playa que tenemos por delante.
Sabemos que a muchos os gusta la tortilla poco hecha pero, en esta ocasión, conviene pasarla un poco más y llevarla cuajada. Así será mucho más fácil de mover.
Sushi alternativo
En la playa o de excursión puede que no tengas a mano una nevera así que, el pescado crudo no es una buena idea. Pero, si eres fanático del sushi, puedes crear alternativas y disfrutar de él fuera de casa. Una de las recetas que más nos gusta es la de makis con melón y jamón. También puedes probar con pollo, aguacate, pepino, zanahoria, huevo cocido, tortilla francesa, jamón cocido, etc.
Esta es una receta perfecta para comer fuera de casa. Haz porciones pequeñas que puedan comerse de un solo bocado y así irán directas del porta alimentos a tu boca.
Quiches
Esta receta francesa es súper fácil de hacer. Solo tienes que poner todos los ingredientes sobre la masa, meter al horno y ¡listo! Es cómoda de comer al aire libre y puedes hacerla para todos los gustos: de verduras, de bacon y queso, de atún… ¡de casi todo lo que se te ocurra!
Para que sea todavía más fácil de trasladar y comer fuera de casa, puedes hacerlas en formato mini. Si tienes moldes de magdalenas, puedes ayudarte de ellos colocando porciones de la masa en los huecos y vertiendo el relleno dentro. ¿No te parece una idea estupenda?
Sandwich
En un día de excursión, no podemos olvidarnos del sandwich. Siempre son un acierto. Existen recetas infinitas y seguro que encontrarás una que agrade tanto a niños como a adultos. El más típico quizás sea el de jamón y queso en pan de molde pero existen incontables variedades y opciones equilibradas y completas.
En primer lugar, puedes probar a cambiar de pan. El pan rústico o de semillas, por ejemplo, son buenos aliado para los sandwiches. Y por último, el relleno puede ser de lo que quieras. Si te enfrentas a una larga tarde de playa o caminata, te recomendamos que sea lo más variado posible, con su porción de proteína y verduras. Un ejemplo de sandwich completo puede ser el de pollo con aguacate, huevo y lechuga o el de pastrami con rúcula, pepinillos y mostaza.
Para transportarlo, lo ideal es que te hagas con una fiambrera o un porta alimentos para sandwich.
Si no eres tan afortunado y este verano te toca seguir trabajando, estas opciones también son ideales para comer en el trabajo. ¿Tú preparas algún plato rápido y fácil para comer fuera de casa que no hayamos mencionado? Estaremos encantados de leerte en los comentarios.
